Heber Valenzuela, Cofundador de Sports Collective. Parque Friendship en Glendale, Arizona.
Por Rosa Tequida
Es bien sabido que el practicar un deporte es una actividad que, no solo ayuda a mantener un físico y una mente saludable a cualquier edad; sus beneficios a nivel individual, familiar y social son innumerables, sobre todo en niños y jóvenes puede llegar a ser determínate.
Heber Valenzuela, dirigente y fundador de Arizona Sports Collective, una organización que nació el año pasado con la intención de ofrecer opciones deportivas para niños hispanos de bajos recursos, afirma que el deporte, no solo ayuda a crecer mental y físicamente sano, puede ser una salvación para niños y jóvenes cuando el entorno social donde viven es hostil y lleno de peligros como drogas, pandillas y vandalismo.
“Practicar un deporte después de la escuela puede ayudar a niños y adolescentes a mantenerse ocupados en algo que los divierte, que les da satisfacción; también los ayuda a descargar energía y emociones negativas y frustraciones de la vida cotidiana”, afirma Heber Valenzuela.
Valenzuela explica que la comunidad hispana de bajos recursos económicos del Valle, es la que está en la peor situación cuando se trata de deportes, porque en sus vecindarios hay menos recursos públicos y menos programas destinados a la recreación deportiva, que es fundamental para el crecimiento sano de niños y jóvenes.
“En las comunidades donde habitan las familias más pobres del Valle hay menos ofertas deportivas, y por desgracia es donde hay más necesidad de alternativas ayuden a evitar que la juventud caiga en drogas y vandalismo”, explicó Heber, quien nació en Durango, México y llego a Phoenix cuando tenía 18 años y desde entonces ha vivido en el oeste del Valle.
En ocasiones los padres de familia no saben qué tipo de deporte puede ser el mejor para sus hijos, ni a donde acudir para informarse sobre los programas deportivos. Para Heber todos los deportes son buenos, lo más importante dice, es practicarlos con constancia. Sin embargo, sí hay un aspecto que, según Heber no puede ser ignorado cuando se trata de buscar las opciones deportivas a disposición en el área donde habitan las familias.
“Para las familias de bajos recursos llevar a sus hijos a practicar un deporte de equipo representa un costo monetario que, en muchas ocasiones, los padres no están en condiciones de pagar.
Es una gran tristeza porque los niños pierden la valiosa oportunidad de practicar un deporte que podría cambiar su vida para siempre”.
Arizona Sports Collective, ofrece becas anualmente a los niños de bajos recursos, dándoles la oportunidad de practicar un deporte con entrenadores preparados, en centros recreativos públicos, sobre todo en áreas como el oeste de Phoenix donde el entorno social es más hostil y los niños enfrentan mayores riesgos de caer en adiciones las drogas y de involucrarse en actividades vandálicas.
El deporte Puede ayudar a desarrollar un autocontrol de las emociones
Los objetivos más importantes de ASC son ofrecer el mayor número de becas posibles a los niños que habitan en las áreas difíciles y dar a la comunidad información educativa, sobre programas públicos a disposición. También se encarga de informar sobre los beneficios del deporte recurriendo a los medios de comunicación y redes sociales. Para este propósito están involucrando organizaciones, negocios y empresas. Se trata de un proyecto donde de la misma comunidad está ayudando a su propia gente.
“Nuestra organización ha tenido una gran respuesta por parte de la comunidad, y de líderes y organizaciones que nos están apoyado. Hemos crecido mucho en poco tiempo y estamos aún en un proceso de formación, sabemos que es mucha la necesidad de niños y jóvenes, nuestra labor a penas ha iniciado”.
Desde cualquier ángulo que se le quiera ver, la práctica de un deporte es siempre un beneficio que enseña a los niños y jóvenes como trabajar en equipo; como aceptarse con las diferencias culturales, raciales y personales de cada uno; pero sobre todo enseña la importancia de la convivencia social en armonía.
“Desde que somos niños el deporte en equipo por ser una competencia sana que requiere constante entrenamiento, nos enseña como estructurar metas en la vida y a como alcanzarlas; el deporte nos puede enseñar la paciencia para alcanzar nuestros objetivos”, expresa Heber, a quien la pasión por el deporte lo ha llevado a prepararse profesionalmente en ese ramo.
Heber comenzó a practicar deporte desde muy niño y continuo por toda su vida estudiantil desde el colegio a la universidad, el futbol ha sido un leal compañero toda su vida, que no solo lo ha protegido, también le abrió las puertas a su actual profesión en el campo de Bussines Sport Marketing. Heber es reconocido y respetado en la comunidad hispana como un experto en mercadotecnia del deporte, carrera que le ha dado muchos frutos en la cual continúa preparándose.
“El futbol ha sido una salvación que me protegió de drogas, pandillas, tristezas y problemas familiares de los que vivía rodeado; si no hubiera sido por el deporte yo no sería quien soy ahora. Gracias al deporte no tuve tiempo de poner atención a las cosas negativas de mi entorno social. El deporte me enseñó a luchar; a superar las dificultades a sudar la camisa para lograr algo”, cuenta con emoción Heber, quien no concibe su vida sin el deporte.
“Con el encierro que ha provocado la pandemia los niños y jóvenes han sido los más perjudicado es muy triste por qué están en crecimiento físico y metal; sus hormonas están en revolución y tienen una gran necesidad de descargar energías y con las canchas y centros deportivos serrados ha sido una situación muy destructiva para nuestros niños y jóvenes”.
Para Heber el espíritu de superación que inculca el deporte es muy fuerte; es un modo de vivir que puede tener un gran impacto en la mente de niños y por esa razón, invita a los padres de familia hispanos a buscar los deportes un camino para sus hijos, no solo como parte importante de su educación, sino como una protección contra la hostilidad social.
“El deporte me enseñó a manejar emociones como el enojo, la tristeza, la frustración; cuando estas jugando dentro de un equipo aprendes a tener control de tus emociones, si no lo haces no puedes jugar porque puedes afectar a los demás; aprendes a pensar en los demás no solo en ti y eso es un gran aprendizaje”.
El deporte además de ser saludable para el cuerpo y la mente, es una práctica emocionante; llena de energía que permite a familias y comunidades compartir juntos grandes momentos de unión y convivencia y además puede traer grandes enseñanzas a niños y adolescentes para enfrentar la vida cotidiana: como el entender que el camino para llegar a una meta no es fácil; que es necesaria a la dedicación, el entrenarse con constancia y tener siempre la disposición para continuar a mejorar como individuos y comunidad.
Rosa Tequida, cuenta con más de 15 años de experiencia en medios de comunicación. Estudio una licenciatura en Ciencias de la Comunicación; tiene un master en Comunicación Internacional y actualmente es candidata a un máster en filosofía.